Con el sello polifacético que nos caracteriza a los seres humanos, en este planeta Tierra, y desde el inicio de los tiempos, cada pueblo desarrolló su propio modo de sintonizar con los ritmos de la naturaleza. Establecer cuál era el tiempo para dar inicio al año calendario, es uno de los tantos ejemplos de diversidad cultural. Para los celtas el año comenzaba el 1º de noviembre"Samhain"; para las culturas andinas, a comienzos del mes de diciembre y para los egipcios el año comenzaba con el solsticio de verano y las inundaciones del Nilo, con Sirio brillando y precediendo la salida del Sol.
En Asia, los hinduístas desde hace 5000 años comienzan a preparar el año nuevo en el mes de octubre, con la celebración llamada "Dasara", que culmina entre noviembre y diciembre cuando celebran el "Diwali", fiesta del año nuevo hindú ó "fiesta de las luces". Ésto me trae a la memoria la celebración de la comunidad judía en Israel y el resto del mundo, en el tiempo de la navidad cristiana , de la "Hanuká" o "fiesta de las luces", conmemorando el retorno al templo de Jerusalén con la victoria de Judas Macabeo sobre los sirios. Por otro lado el año nuevo judío se celebra el primer día del mes hebreo de Tishri (entre setiembre y octubre), se llama "Rosh Hashanah", el día en que Yahvé creó el mundo.
En China sabemos que se rigen por el calendario lunar, por lo tanto el año no empieza el 1º de enero (oscila entre el 21 de enero y el 19 de febrero).
Buceando en el pasado de nuestra historia, recordemos que el calendario lunar primitivo de Roma tenía 10 meses, comenzando por martius (marzo - díos Marte), siguiéndole aprilis, maius, iunius, quintilis, sextilis, septembris, octobris, novembris, y decembris. Numa Pompilio (753-674 a. de C.) lo adaptó al año solar agregándole dos meses: januarius y februarius.
Los romanos celebraban el día 1º de enero la fiesta de su dios Jano, (el bifronte) representado por dos rostros, uno barbudo y viejo y el otro joven, una vara y una llave (era el protector de las puertas y de los comienzos). Por este motivo quedó establecido como primer mes del año calendario romano.
Julio César en el 47 a. de C., decretó que el año debía comenzar en enero y que tendría 31 días (comienzo del calendario juliano), hasta la reforma del calendario gregoriano recién en el año 1582 (reforma e inclusión de los años bisiestos).
En fin.....Quieren más curiosidades?...En Italia la fecha del Año Nuevo variaba según la ciudad que correspondiera, por ejemplo: Florencia comenzaba el Año Nuevo el 25 de marzo (hasta el 1749), en Venecia el 1º de marzo y en Milán el 25 de diciembre hasta 1797. ¿Qué tal?
Con seguridad, cada pueblo basó la elección en sus conocimientos científicos y/o creencias religiosas. En este pequeño recorrido rescato la oportunidad de seguir sorprendiéndonos con la complejidad, versatilidad que somos capaces de crear, re-crear y al mismo tiempo convivir todos juntos, aunque no estemos de acuerdo, con humildad, tolerancia y respeto, bajo un mismo Cielo.